¡Adiós, humedades! Cuando una fachada rehabilitada cuida de tu salud

No siempre seamos conscientes de ello, pero el estado de los edificios en los que vivimos afecta directamente a nuestra salud. Por ejemplo, un aislamiento térmico deficiente de las fachadas puede provocar la aparición de humedades por condensación. Y esas humedades tan desagradables a la vista suponen un riesgo para nuestra salud.

¿Por qué? Porque las humedades pueden provocar enfermedades respiratorias, reacciones alérgicas o crisis de asma. También problemas musculares e irritación en ojos, nariz, garganta y piel.

¿En tu edificio hay humedades? Pues quizá sea el momento de afrontar la rehabilitación de la fachada. Y no solo para librarte de esas nocivas inquilinas, sino también porque estarás invirtiendo en eficiencia energética. Así, cuidarás también de la salud de tu economía doméstica, pues veras cómo disminuyen los importes de tus facturas de suministros. Además, se incrementará el valor de tu propiedad. Y, sí: cuanta menos energía necesites consumir para mantener el confort térmico en tu hogar, más estarás protegiendo al medioambiente, al reducir la emisión de gases nocivos a la atmósfera.

Aprovechamos para recordarte que, si bien existen ayudas para la eficiencia energética,  si el certificado energético de tu edificio es de categoría E, F o G, ¡tenéis que poneros las pilas con su rehabilitación energética! Porque, por norma, antes de 2030 todos los locales, viviendas y oficinas deberán contar con certificado de categoría E, y haber alcanzado la D para 2033.

¿Cómo solucionar un problema de humedades en una fachada?

En CROLEC somos expertos en el tratamiento de humedades y filtraciones para garantizar la durabilidad y la salud de las estructuras. Pero, ¿cuál es el proceso para hacerlo?

• Analizar la situación. ¿Cómo de grave es el problema de humedades que tiene el edificio? Y, la pregunta más importante: ¿provoca filtraciones al interior?
• Limpiar la fachada para eliminar manchas y algas que hayan podido aparecer. Es un paso clave para que el tratamiento que se aplicará a continuación funcione a la perfección.
• Aplicar el tratamiento hidrofugante que impermeabilizará la fachada.
• Revisar y reparar grietas. También asegurar que los puntos de unión fachada-tejado y fachada-suelo no tienen fugas.
• Darle a la fachada un acabado estético que redondee el lavado de cara.

Aunque, sin duda, la solución ideal para acabar con un problema de humedades y prevenir que vuelva a aparecer es mejorar el aislamiento de la fachada. Es la mejor barrera contra la lluvia, principal culpable de su aparición. Pero también de otros agentes externos como el viento, la contaminación o, por supuesto, las bajas y altas temperaturas.

Diferentes formas de rehabilitar una fachada

A la hora de rehabilitar fachadas de edificios, en CROLEC optamos por dos técnicas diferentes: las fachadas SATE y la fachada ventilada. Ambas protegen tu vivienda de las humedades, ¿conoces sus diferencias?, aquí explicamos si fachada sate o ventilada.

La primera consiste en un revestimiento que reduce el consumo energético y aumenta el confort en el interior de las viviendas. Gracias a la rotura de puentes térmicos, evita las condensaciones. Con la segunda, se coloca el aislante en la envolvente, pero se deja una pequeña cámara de aire entre este y la fachada. Así, se produce un efecto chimenea que permite la ventilación continua. Esa constante circulación del aire dentro de la cámara mejora la transpirabilidad del edificio y supone una protección extra para evitar la condensación y la humedad.

Al ser expertos en rehabilitar edificios somos especialistas en cuidar del exterior de tu vivienda para mimar el interior y la salud de quienes la habitáis. Pídenos presupuesto sin compromiso, estudiaremos tu caso y te ofreceremos la solución que mejor se adapte a tus necesidades y a tu bolsillo, informándote de aquellas subvenciones a las que puedas optar.